rodero2, ra

1. adj. Perteneciente o relativo a la rueda o que sirve para ella.
2. m. desus. En las imprentas, mozo que estaba encargado de mover la rueda de las máquinas.
3. f. Señal que deja impresa la rueda de un vehículo en el suelo.
4. f. Camino abierto por el paso de los carros a través de los campos.

Rodera hace referencia al mismo tiempo tanto a aquella persona que mueve la rueda, como al surco que ésta deja impresa en el camino. Tanto a la rueda en sí misma, como a los caminos que ésta dibuja en el suelo. Rodera nos define como ciclistas y a la vez habla de la marca indeleble que todo viaje deja en nosotras mismas. Un surco a veces visible para las que vienen detrás, pero que siempre define nuestro propio camino en la vida. Todo eso significa Rodera y nuestra forma de entender el bikepacking.

Este proyecto nace principalmente con el objetivo de redescubrir nuestro propio territorio a través de la bicicleta, como un ejercicio personal de trabajar en la creación de una ruta que nos permitiera conectar esas sierras, pueblos y enclaves que nos parecían especialmente genuinos y representativos del territorio valenciano. El aparentemente sencillo ejercicio de intentar hilvanar todos esos puntitos en el mapa simplemente resultó imposible. Es más, el ejercicio de empezar esta investigación muy pronto generó una lista creciente de lugares de interés. De esta forma, la idea evolucionó hacia intentar generar un entramado de rutas y enlaces. De enlaces no solo entre ellas mismas, sino también con otras rutas en torno al territorio valenciano como por ejemplo Montañas Vacías, Burrally y Altravesur por nombrar unas pocas.

Otro de los pilares de este proyecto es también la necesidad del retorno. Retorno entendido como un gesto de correspondencia con la comunidad cicloviajera, como nuestra aportación desde estas latitudes a un grupo creciente de proyectos afines que van surgiendo poco a poco en otros lugares. Así como nosotras disfrutamos recorriendo rutas que otras preparan y nos permiten descubrir sus territorios, queremos que Rodera sea una herramienta para facilitar ese descubrimiento a otras ciclistas. Trasladar a este territorio una filosofía de cicloturismo, más pausado, autoguiado y autoorganizado, que hemos disfrutado en otros rincones y que nos apetecía desarrollar aquí. Un ejercicio de reciprocidad.

Y dada la magnitud del proyecto, y para no abrumarnos con la ingente faena que esto supone, vamos a ir paso a paso, empezando con un par de rutas independientes. Y más adelante iremos desvelando sus enlaces, extensiones y ramificaciones.

Además, no queremos perder de vista el carácter abierto e inclusivo que buscamos en este proyecto. Intentaremos que la información esté lo más clara posible para que sea sencillo que cada una se organice sus loops y tramos adaptados a su disponibilidad de tiempo, su nivel y su experiencia. Además de la información que estará disponible en la web, publicaremos una guía de cada una de las rutas para que puedas descargarla y llevarla contigo durante el viaje. Y, en la medida de lo posible, estaremos atentas a vuestras preguntas para facilitaros la organización y ayudaros.

Nuestro territorio es alargado y estrecho, pero tenemos la suerte de tener cierta vertebración territorial gracias a una red de trenes de cercanías y regionales todavía activa. Sin ser todas nuestras rutas circulares, es sencillo realizar pequeños tramos de forma independiente y sin necesidad de vehículos privados de apoyo. Creemos en la intermodalidad tren-bici y queremos animaros a hacer uso de ella. Nuestro territorio lo permite en gran medida y hace fácilmente prescindible el uso del vehículo privado.

Por último, nos gustaría exponer en qué espectro del panorama bikepacking se sitúa este proyecto. El bikepacking ibérico ha cristalizado principalmente en su vertiente competitiva. Ha generado una miríada de eventos de carácter competitivo, con un un tiempo límite y una duración corta. Si bien hemos participado en algunas de ellas y seguiremos haciéndolo, es un formato que pensamos bastante excluyente en género y clase y de un impacto sobre el territorio no siempre sostenible.
Poco a poco, sin embargo, van abriéndose camino en la península otras propuestas de carácter no competitivo siguiendo la estela de Montañas Vacías. Abiertas en espacio y tiempo, estas iniciativas nos parecen muy interesantes en cuanto al amplio abanico de públicos y perfiles diferentes a los que se dirigen. Así como el impacto positivo que pueden generar en el territorio, provocando menos fricciones en el mismo al suponer un goteo más pequeño, pero más prolongado sobre los núcleos urbanos sobre los que va incidiendo. Esta es al menos nuestra intención y la dirección en la que queremos trabajar.